Un análisis escrupuloso de los textos que nos ha dejado Colón, muestran que sus conocimientos corresponden a los equivalentes a un maestro cartógrafo (y de los muy buenos) de su época, además, especial amigo de Juan II, lo que significa taller propio en Lisboa probablemente con muchos beneficios.
De repente todo eso parece desaparecer, y se presenta en la puerta de la Rábida (con un niño muy niño) y se pone de charlotea con el portero, y hablan ¡de cosmografía! y mientras cuentas las oposiciones de Venus con Marte, Colón dice que viene a Castilla a ofrecer a los Reyes un viaje a oriente por occidente. Y como el fraile debía ser un político tenía amistades en la corte que le hablaron a la reina sobre el tema, y rápidamente envió dinero a la Rábida para que colón se comprase ropa y se presentase en la corte ¡lo que hacen los amigos!
¿Quién es capaz de tragarse ese bolo? la Historia dice que los Católicos… y evidentemente muchísima gente dada la cantidad de literatura que hay sobre el tema. Particularmente me parece un relato vulgar, carente de imaginación, pero como decía Goebbels «si repites una mentira muchas veces…»